Querido Mariano: Cuando te incorporaste al club, de la mano de Rafa Goberna, e hiciste tu presentación, ya me causaste un gran impacto. Serio, pero irónico al mismo tiempo, pensé…bien.

Al ver que jugabas a pádel, mucho más, y, sobre todo, al comprobar que te tomabas muy en serio el hecho, no sólo de ser rotario, sino de ejercer como tal, ya me ganaste enteramente.

Me preguntabas, entonces, si podrías aprender toda la liturgia rotaria, y si lo harías bien de Macero…. en una de tus primeras apariciones como tal.

Cuántos proyectos compartidos, cuántos carnavales desarrollados de inicio a fin, hasta el objetivo cumplido. Los inicios de la página web hasta su ” take off”, tu actividad como CIC de nuestro club , pendiente siempre de las noticias del Distrito para distribuirlas a la Junta Directiva del club……… e introducirlas, hasta altas horas de la noche, en la citada web.

 Nunca recibí una negativa, ante una petición de ayuda…..

Eh, Pancho despierta…. Mariano no está aquí…..

¿ Cómo que no está…? Si yo el Martes por la noche planificaba con él, aspectos de la implantación de la página web en otros clubes de Palma, si hablamos de las nuevas incorporaciones de socios al club, si quedamos hasta mañana, si……….me dijo: “ oigo el “clink” de la máquina del supermercado, no gastes mucho, yo también estoy comprando…., cuídate….”

Cuando estuve frente a ti, atónito, sin palabras, en blanco, sin conseguir secar mis gafas, intentaba despertar. No podía…..o no quería, prefería pensar que estaba soñando….hasta que, creí oír tu voz : “ Pancho, que haces aquí , con tanto que hay por hacer, ánimo amigo a luchar…, pasemos revista al cronograma de actos que tenemos que asumir…”

¡Este es mi Mariano, NUESTRO MARIANO!

 Amigo, donde quiera que estés, siempre te sentiré a nuestro lado, como un rotario más en nuestra reunión, e intentaré con todas mis fuerzas continuar, con la ayuda de todos tus amigos, lo que tú, con tanta ilusión, creaste.

¡Qué lección de rotarismo ha sido tu  paso por nuestro Club, Palma Junípero Serra!

Gracias.

 Pancho